Uno de los momentos más difíciles y duros que nos puede suceder es la pérdida de una persona cercana a nosotros y con la que hemos vivido durante toda nuestra vida. Esta pérdida es aún más difícil de superar cuando se trata de nuestro cónyuge o pareja, es decir, de la persona con la que hemos compartido tantísimas vivencias a la largo de nuestra vida. La pérdida del cónyuge es algo que se maneja de manera diferente, dependiendo de la sensibilidad y el temperamento de cada uno y de otros muchos factores.
Es posible que no se conozcan bien los pasos que debe de dar la viud@. A continuación te detallamos algunos de los pasos a seguir ante tal pérdida:
Las mujeres por lo general son las más afectadas por la muerte del conyuge y por lo tanto, son mucho más propensas a la viudez que los hombres. Esto se debe a la diferencia de edad que se observa a menudo en las parejas. Se cree en general que las mujeres manejan esta difícil situación de manera más pragmática, ya que están dotadas de una cierta fuerza de carácter que les permite manejar mejor que los hombres un dolor como éste. Los hombres viudos, estadísticamente hablando suelen estar en la misma situación que las mujeres viudas con la diferencia de que a las viudas les resulta mucho más difícil superar este dolor.
No existe una receta milagrosa para ayudar a un viud@ a superar su pérdida, ya que el dolor se maneja de manera diferente, teniendo en cuenta diferentes consideraciones subjetivas. Lleva tiempo llorar. Por lo tanto, es prácticamente imposible recomendar métodos para ayudar a las personas a superar su pérdida. Sin embargo, es posible concentrarse, por ejemplo, en mudarse a una nueva casa, rodearse de amigos y familiares. Estos métodos ciertamente no tienen un efecto inmediato; es con el paso del tiempo que el dolor pasa. Es importante destacar que la diversidad de sensibilidades y psicologías puede motivar que algunos viud@s decidan dejarse sumir en el dolor para sentir plenamente la falta de su cónyuge fallecido; es una forma de no dejar que se instale la monotonía y de mantenerse de alguna manera apegados a su cónyuge fallecido. El apoyo de la familia y los amigos sigue siendo algo necesario para acompañar al viudo en el dolor de la pérdida de un ser querido.
Deja una respuesta