Cuando alguien que nos importa está lidiando con una pérdida, a menudo nos quedamos sin palabras. Queremos ser reconfortantes. Queremos que se sientan mejor de alguna manera. Como mínimo, no queremos decir nada que los haga sentir peor.

Es fácil recurrir a los clichés – el mismo tipo de cosas que hemos oído decir a otros en el pasado. A veces eso está bien, y a veces esos mismos clichés son en realidad un poco destructivos.

Hemos preparado una guía rápida de algunas cosas buenas para decirle a un amigo que está de duelo y a algunas otras que tal vez quiera evitar.

Cinco cosas que decirle a una persona en duelo

«Lamento su pérdida.» Al grano y honesto, este es uno de esos clichés que resisten el paso del tiempo.

«Déjame ayudarte con _.» En lugar de preguntarle a tu amigo afligido con qué le gustaría que lo ayudara, simplemente hazle una sugerencia. «Deja que me encargue de cortar el césped durante las próximas semanas.» «Voy corriendo a la tienda, ¿qué tal si te traigo algo de comer?» Puede ser difícil para una persona afligida pedir ayuda o especificar lo que necesita. Si ves oportunidades para ayudar, sólo ofrécelas.

«¿Te gustaría hablar de ello?» Es posible que su amigo no esté listo para hablar de cómo se siente todavía, pero si lo está, prestarle un oído puede ser un beneficio importante para su recuperación. Ofrécete a escuchar. Si dice que no está listo, acepta esa respuesta. Si está listo, debe escuchar, y tratar de no interrumpir con «deberías».

«¿Puedo contarte mi recuerdo favorito con tu ser querido?» Esta es una manera fácil y genuina de ayudar a tu amigo a celebrar la vida de la persona que perdió.

«Estoy aquí para ti si me necesitas para algo.» La pérdida puede hacer que el afligido se sienta solo. El simple hecho de hacerles saber que tienen un amigo dispuesto a contestar el teléfono en cualquier momento puede ser enormemente reconfortante.

Cinco cosas que no se le deben decir a una persona en duelo

«Era su momento.» Cualquier declaración que insinúe que la pérdida de su amigo fue necesaria o intencional debe ser evitada. Nunca le dirías a un amigo enfermo que era «sólo su hora» de enfermarse, ¿verdad? En la misma línea…

«Esto era parte del plan de Dios.» Esta, como «Era su hora», asume que la pérdida de tu amigo fue intencionada. También asume que usted sabe algo sobre la pérdida que él no sabe. A veces pasan cosas difíciles y no sabemos por qué. Está bien que lo reconozcas.

«Tienes que ser fuerte.» A tu amigo se le permite sentir como quiera que se sienta. Si quiere llorar, se le debe permitir hacerlo. Si se apaga emocionalmente, también está en su derecho. Permanece a su lado si puedes, pero no fuerces a un afligido a llorar de ninguna manera en particular.

«Está en un lugar mejor.» No importa cuáles sean sus creencias, a los ojos del afligido, el mejor lugar para que su ser querido perdido esté es aquí en la Tierra, vivo.

«Sé cómo te sientes.» La situación de cada uno es diferente. Aunque probablemente hayas experimentado algo similar a lo que está pasando tu amigo, no sabes exactamente cómo se siente, y decir que lo haces disminuye su experiencia. Mejor sería decir: «No sé cómo te sientes, pero estoy aquí para ti».